Foie gras crudo
El foie gras proviene de un ser vivo. Por lo tanto, el tamaño, el color y la textura difieren de una pieza a otra.
Estas características varían entre dos patos y de una crianza a otra. Pueden verse afectadas por las condiciones climáticas durante la crianza, por ejemplo (altas temperaturas, frío, etc.).
Aunque no existen dos foie gras idénticos, se han creado categorías para clasificar todos los foie gras según su calidad y, por tanto, el uso que se les puede dar.
Seleccionados y clasificados según su peso, luego son clasificados visual y táctilmente por operarios especialmente formados.
Los foie gras son desvenados delicadamente y a mano por hombres y mujeres cuya experiencia se ha adquirido a lo largo de los años.
Gracias a esta experiencia, nuestros foie gras desvenados conservan su integridad, tan importante para la calidad de la terrina que se va a elaborar.
Foie gras listo para servir
El foie gras puede prepararse de varias maneras diferentes.
El foie gras crudo se sazona (sal, pimienta y a veces otros ingredientes como alcohol o frutas) y luego se coloca en su envase antes de ser cocido.
La etapa de cocción es primordial ya que condiciona, entre otras cosas, la textura del foie gras:
- Pasteurizado, el producto es en semi-conserva, conservado entre 0°C y +4°C, se le llama medio cocido y su textura será generalmente más suave que la de un foie gras en conserva.
- Esterilizado, está en conserva y permite un almacenamiento facilitado gracias a su larga duración y su conservación a temperatura ambiente.
Según la manera en que se desee servir (aperitivo, entrada, plato), el costo por porción deseado y el sabor buscado, existe un foie gras listo para servir adaptado a cada necesidad, ya sea que el usuario sea restaurador, panadero, carnicero-charcutero o proveedor de catering. Para responder a todas las necesidades, existen varias categorías de foie gras listos para consumir (características a continuación).